Ahora nos queda esa maravillosa parte del mes de enero en el que hay que hacer dieta, porque las vacaciones se van pero el turrón se queda de recuerdo, pasar mucho frío, y los que somos estudiantes pasarnos horas y horas en nuestras respectivas bibliotecas hasta sentir que la cabeza nos va a estallar.
Pero seamos positivos y pensemos en cosas más agradables.
El pasado día 3 fue el cumple de mi chico y le di la sorpresa (relativa, porque a nadie le sorprende mucho que yo haga tartas) de hacerla una tartita con una decoración que sabía que le haría ilusión.
La tarta en sí era muy sencilla, como bien dice el título de la entrada, era un bizcocho de plátano que cubrií con una cobertura muy cremosa de chocolate blanco. Al principio la combinación me convencía mucho, y la hice fundamentalmente porque sabía que eran cosas que le gustaban, pero al final me sorprendió muy muy para bien, de hecho es una mezcla que pienso repetir.
Bizcocho de Plátano:
- 40g de mantequilla
- 125g de azúcar
- 1 huevo
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 plátano maduro
- 130g de harina
- 1 cucharadita de levadura
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1 pizca de sal
- 125ml de nata agria
Triturar el plátano hasta formar un puré y reservar. Batir la mantequilla a temperatura ambiente junto con el azúcar, añadir el huevo, la vainilla, y el puro de plátano.
Cuando todos los ingredientes estén perfectamente integrados, añadimos la nata, y por último los ingredientes secos (que habremos mezclado previamente).
Vertemos la mezcla en un molde previamente engrasado e introducimos en el horno a 180º aproximadamente 25 minutos, o hasta que introduzcamos un palillo y salga limpio.
Para este bizcocho yo utilicé un molde cuadrado bastante pequeño (20x20cm) así que si vais a hacerlo en un molde grande os recomiendo que dobléis las cantidades de los ingredientes.
Feliz semana! =)
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